El incremento en el número de hombres que acude al centro de estética para eliminar el vello de una parte concreta de su cuerpo o rostro es una realidad imparable en los últimos años. Moda, estética, comodidad, higiene… los motivos son diversos y los métodos tradicionales de depilación se adaptan a las demandas y necesidades de una nueva clientela.
Es importante recordar las características básicas de la epidermis masculina y tener en cuenta las particularidades de su vello, porque estas premisas determinarán el método de depilación más adecuado en cada caso.
- La piel masculina es más gruesa que la de la mujer, aunque esto no quiere decir que tenga una sensibilidad menor. El exceso de sensibilidad puede convertir determinados métodos de depilación en desaconsejables, como la depilación eléctrica.
- La piel masculina tiene un mayor número de folículos pilosos. Como tónica general, un hombre tiene mayor cantidad de vello que una mujer y además, dependiendo de los componentes genéticos, este vello puede tener también mejor grosor, mayor resistencia y un tono más oscuro. Todos estos motivos aumentan las dificultades para su eliminación.
- La presencia de vello en tórax, hombros y espalda es más común en los varones. La actividad de las hormonas masculinas, en concreto de la testosterona, favorece la aparición de pelos que pueden resultar antiestéticos en el pecho o en la parte superior de la espalda.
- La piel masculina presenta una mayor actividad de las glándula sebáceas y sudoríparas que puede complicar la aplicación de determinados productos.
- En algunas ocasiones, los poros pueden padecer una excesiva dilatación y originar problemas de vellos enquistados que es necesario tratar.
La depilación masculina con la cera y el láser
Al igual que con las mujeres, el profesional debe evaluar el estado de la piel del cliente antes de recomendar un método de depilación u otro. Los aspectos claves que deberá tener en cuenta son:
- Estado general de la piel. Irritación, sequedad excesiva, descamación, pequeñas lesiones cutáneas producidas, por ejemplo, por afeitados anteriores…
- Zona a tratar. Según la extensión y el grado de sensibilidad de la zona a depilar será más o menos aconsejable un método u otro.
- Color del vello y fototipo de la piel. Es especialmente si se opta por el láser o la depilación de luz pulsada, porque el vello demasiado claro resulta difícil de eliminar, mientras que el oscuro sobre una piel clara es perfecto para este sistema.
- Sensibilidad personal del cliente. Para algunos hombres, especialmente los que se eliminan el vello afeitándolo, la depilación con cera u otros métodos puede ser dolorosa. Este dolor hay que intentar minimizarlo lo máximo posible.
El vello es una estructura formada por células queratinizadas que tiene su origen en el folículo piloso donde está fuertemente adherido. Para su eliminación existen tres métodos básicos: el afeitado, con el que sólo desaparece la parte aérea (visible) del vello; la cera, que lo arranca desde la raíz y la técnica láser, que además atrofia el folículo progresivamente para retrasar su crecimiento y reducir su presencia.
Mayoritariamente, los hombres eligen la depilación con cera en cualquiera de sus tres variantes; fría, tibia o caliente, el láser y la luz pulsada.
Depilación masculina con Cera.
La cera es uno de los métodos tradicionales para la depilación que tiene su origen en la Antigüedad. Muchos hombres eligen este método por rapidez, precio, eficacia y duración. El vello puede tardar en salir hasta cuatro semanas. Para algunos es demasiado doloroso, especialmente en el pubis, tórax y espalda. La composición de las ceras actuales incluye diferentes resinas y aceites vegetales y minerales para resultar eficaces sin provocar daños en la piel. En cuanto a los sistemas de aplicación, la profesional puede optar por bandas, cartuchos de roll-on o cera caliente que se unta con una espátula sobre la zona a depilar. Está especialmente indicada para la eliminación del vello en las piernas y en las axilas, siempre con las debidas precauciones de control de temperatura y extracción de la cera evitando tirones en zonas delicadas.
Depilación masculina con Láser.
Los hombre cada vez mas eligen la fotodepilación para hacer desaparecer el vello de manera progresiva. Es importante recordar que desde la pubertad hasta, aproximadamente, los 50 años el sistema hormonal favorece el crecimiento contante del vello, incluso hacer que aparezca en lugares donde nunca antes ha habido, como las orejas o las fosas nasales. Por esta razón no es la mejor opción el láser, porque deja de ser depilación definitiva.
Pese a esto, es cierto que la luz de los láseres y la luz pulsada se transforma en calor y ataca directamente el bulbo piloso debilitándolo hasta conseguir que su actividad cese o se reduzca al mínimo. La depilación láser es especialmente recomendable para determinadas zonas de la cara, el cuello y la corrección del entrecejo, aunque algunos también la recomiendan para espaldas, hombros y pecho.
Junto a estos 2 métodos hay otras series de tratamientos, como la aplicación de cremas depilatorias, no recomendados para pieles muy sensibles, zonas intimas y mucosas, y otros menos conocidos a base de productos naturales como la depilación con azúcar o miel.
Cuidados antes y después de la depilación
Los actuales tratamientos de eliminación del vello no se limitan a la extracción del pelo. Los cuidados de la piel, pre y post depilatorios, han cobrado gran importancia y los productos que reducen la irritación al tiempo que refrescan, suavizan e hidratan son imprescindibles para que la epidermis recobre su equilibrio tras la ‘agresión’ que supone cualquier método depilatorio. En el caso de los tratamientos masculinos, hay que tener en cuenta que muchos hombres presentan pequeñas lesiones cutáneas causadas por los constantes afeitados. Antes de la cera o de la foto depilación es conveniente una ligera exfoliación que elimine las células muertas y deje al descubierto los poros y vellos que hayan quedado encarnados. La limpieza exhaustiva es también un requisito básico para obtener óptimos resultados. Existen también productos específicos que preparan la piel para la depilación y otros que hacen que se recuperen con más facilidad tras el tratamiento. Por último, los inhibidores del crecimiento del vello son el complemento perfecto para hacerlos desaparecer de forma eficaz.
No Comments